La instalación de la planta piloto en Torre Cardela ha permitido su puesta en funcionamiento.  Estará durante un tiempo prolongado en fase de pruebas, para comprobar que el proceso funciona con éxito y en condiciones de bioseguridad.

La planta de tratamiento biológico llegó el pasado martes 19 de febrero a Torre Cardela. Se trata de una innovadora planta con la que se pretende demostrar que la eliminación de nitratos y otros contaminantes presentes en el agua bruta destinada a consumo humano puede realizarse de manera más económica y con menor impacto ambiental que usando otros sistemas tradicionales como la ósmosis inversa. Se trata de un hito muy importante en la vida de este proyecto LIFE. Se espera que la nueva planta elimine los contaminantes consumiendo menor cantidad de energía, sin generar residuos y produciendo agua de buena calidad. Además, toda la energía consumida por el nuevo sistema será de origen solar, gracias a la instalación de paneles fotovoltaicos.

El proyecto LIFE ECOGRANULARWATER dio comienzo en septiembre de 2017 y durante todo este tiempo se han estado realizando diversos trabajos preparatorios y de experimentación que han posibilitado la construcción de la planta piloto a escala real. Por un lado, se ha realizado un muestreo del acuífero que ha confirmado la presencia de nitratos en el agua, así como la variabilidad temporal de su concentración ligada a las prácticas agrarias y a las condiciones meteorológicas (la distribución de las precipitaciones principalmente). Por otro lado, se han desarrollado pruebas de laboratorio que han definido las condiciones óptimas de operación del biorreactor (frecuencia de llenado y vaciado, tiempo de decantación, aireación), han determinado cuál es la mejor fuente de carbono y su concentración, así como los microorganismos que ofrecen resultados más sobresalientes en el proceso de desnitrificación. Asimismo, en base a las fases de este sistema, al rendimiento del biorreactor a escala de laboratorio y a las características particulares del espacio donde será ubicada, se ha elaborado un diseño pormenorizado de la planta a escala real, incluyendo algunas variaciones respecto a la propuesta inicial.

Tras alcanzar el consenso sobre el diseño de la planta, la empresa Construcciones Otero comenzó a adquirir los equipos necesarios. Ha sido a principios de 2019 cuando se ha construido la planta en el taller de la compañía, donde se llevaron a cabo también las primeras pruebas de puesta en marcha que han confirmado el correcto funcionamiento.

Una vez instalada en Torre Cardela, el reto más inmediato es ponerla en marcha y conseguir la formación de los gránulos, unas bolitas de aproximadamente 2 cm de diámetro donde se concentran los microorganismos que llevarán a cabo la desnitrificación y, por tanto, la eliminación de nitratos del agua. La planta estará durante un tiempo prolongado en fase de pruebas, para comprobar que el proceso funciona con éxito y en condiciones de bioseguridad.  Las acciones de seguimiento incluyen el control de la calidad del agua, el estudio del proceso de eliminación de nitratos, análisis de DBO₅, de sólidos totales, sólidos en suspensión y sólidos volátiles y análisis de contaminantes orgánicos.